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Más mujeres, más participación y más equipo: la nueva etapa de la Agrupación de Cofradías de Cabra
El nuevo rumbo de la Agrupación General de Cofradías de Cabra ya está en marcha. Tras la reciente elección de Bernardo Nicolás Fresnillo Romero como presidente, se ha configurado un equipo de trabajo que no solo rompe moldes, sino que marca un hito en la historia de la institución: por primera vez, la nueva junta de gobierno está compuesta mayoritariamente por mujeres cofrades.
Una renovación que llega con fuerza, compromiso y una clara apuesta por la especialización y la participación en el seno de la agrupación de cofradías más antigua de la diócesis cordobesa. El nuevo equipo se estructura por áreas, con vocalías enfocadas a los diferentes aspectos de la vida cofrade y una visión clara: hacer que todas las cofradías agrupadas participen activamente a través de una gestión compartida entre la propia junta y el Cabildo General de Hermanos Mayores.
«La Semana Santa no se organiza en un mes, ni en dos. Aunque pueda parecer lejana, ya estamos trabajando en los pilares que van a sustentar estos próximos cuatro años de vida cofrade en Cabra», señalan miembros de la nueva dirección. Desde la formación, la juventud o la acción social, hasta la coordinación con instituciones y entidades como el Ayuntamiento y la Diócesis, todo está pensado para favorecer una relación fluida, cercana y eficaz entre agrupación y hermandades.
El estilo de trabajo se plantea horizontal, basado en la complicidad y el respeto institucional. «Un modelo colaborativo que busca sumar capacidades y dar voz a todos los sectores implicados, huyendo de personalismos y abriendo las puertas a un liderazgo compartido», como ha señalado el presidente en la primera reunión mantenida con los miembros de su equipo, que se hará público en las próximas semanas.
A falta solo del visto bueno de la autoridad eclesiástica y del traspaso oficial con la anterior junta, todo está listo para que la nueva etapa comience a rodar. Se pondrán nuevos proyectos sobre la mesa para ir consensuando su realización con las cofradías agrupadas. Cabra abre así un nuevo tiempo cofrade, en el que la renovación viene de la mano del talento, la organización y la vocación de servicio.
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