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La gloria del águila: un tango para el Plus Ultra
14.09.16 - Escrito por: Manuel Guerrero Cabrera
Este año se cumple el centenario del nacimiento del tango-canción con Mi noche triste, una creación de Pascual Contursi sobre un tango de Samuel Castriota llamado Lita, compuesto en 1916 (algunos estudiosos consideran que fue en 1915, pero esta cuestión no es la que importa ahora). Así se considera oficialmente, a lo que se suma que Carlos Gardel lo cantara un año después, en 1917, en el Teatro Esmeralda, fuera de sus círculos habituales, ante un público de alta sociedad, además de grabarlo y de interceder para que se incluyera en un sainete que lo popularizó.
Este el comienzo del influjo de un estilo musical que atravesó el Río de La Plata y llegó a todo el mundo, desde Londres a Tokio, pasando por París, uno de sus focos más relevantes, y Barcelona. El tango creó toda una moda y hasta un color tango, de cromática anaranjada (tangerine-tango). En España fue muy difundido, en especial, en la voz de Carlos Gardel, quien visitó nuestro país en 1923 y en 1925-27; precisamente, en esta segunda visita pudo vivir las impresiones del vuelo del Plus Ultra en España.
Recordemos que el Plus Ultra fue el primer avión español que voló de Europa a América, de Palos de la Frontera a Buenos Aires. Era un hidroavión Dornier Do J (o Wal, "ballena"), creado a principios de la década de 1920 por la compañía alemana Dornier, que realizó la ruta en varias fases con el itinerario: Palos-Las Palmas de Gran Canaria-Islas de Cabo Verde-Fernando de Noronha-Recife (Pernambuco)-Río de Janeiro-Montevideo-Buenos Aires. Los cuatro integrantes de la tripulación del Plus Ultra fueron Ramón Franco (como muestra el monumento que tenemos en El Paseo, colocado en el mismo año de esta proeza), Julio Ruiz de Alda, Juan Manuel Durán y Pablo Rada.
Volviendo a Carlos Gardel, en 1926 se encuentra en Barcelona y, al año siguiente, grabará el tango La gloria del águila en homenaje a la hazaña del Plus Ultra.
La música de este tango es obra de Martín Montserrat Guillemat (Morell, Tarragona, 1906 ? Barcelona, 1990), que especialmente fue músico de cine y actor en diversas películas, pero había comenzado antes en el mundo de la música, en 1925, con el chotis Ni pintao que grabaron, entre otros, Mercedes Vecino, Cassen y Rafael Medina. Según cuenta Orlando del Greco en las semblanzas de artistas de Todotango.com, el cantor le pidió a Martín Montserrat que le mostrara los tangos que llegaban de Argentina, enseñándole también los que había compuesto, entre ellos, La gloria del águila que Gardel decidió grabar, ya que había pasado un año desde que el Plus Ultra llegara a Buenos Aires.
La letra es de Enrique Nieto de Molina (Manila, Islas Filipinas, España entonces, 1888 ? Barcelona, 1969), colaborador en La Esfera, Blanco y Negro, Mundo Gráfico y otras revistas de la época; autor de operetas y zarzuelas, también de cuplés como Pastorela, Mi España o El Molinero. Viajó a Argentina en 1915 donde conoció de primera mano el éxito de Gardel y Razzano con el tango, a partir de Mi noche triste. En 1920 volvió a España.
He aquí la letra, que no podía exponer mejor la empresa del Plus Ultra y que, al igual que en el monumento que hay en El Paseo de nuestra localidad, lo relaciona con el viaje de Colón:
El rey del aire, tendió sus alas
y fue radiando como el sol, que al mundo baña
con la proeza de cuatro hispanos
que son un timbre más de gloria para España.
Salió el Plus-Ultra con raudo vuelo,
mirando al cielo, rumbo a la ciudad del Plata...
El orbe entero se ha estremecido,
y el entusiasmo en todas partes se desata...
Desde Palos, el águila vuela,
y a Colón con su gran carabela,
nos recuerda, con tal emoción,
la hazaña que agita todo el corazón...
Franco y Durán, Ruiz de Alda los geniales
los tres con Rada son inmortales,
los españoles van con razón
cantando al ver el galardón de su Nación...
Y cantarán con todas las naciones,
entrelazando los corazones
y en tal clamor surge un tango argentino
que dice a España: ¡madre patria de mi amor!
Cruzó Las Palmas y Porto Praia,
glorioso llega en Fernando Noroña,
prosigue el vuelo y en Pernambuco
da con su raid, al mundo la impresión más honda.
En Río Janeiro, Montevideo,
suenan campanas pregonando la victoria,
y en Buenos Aires la hija querida,
al fin se cubren los valientes ya de gloria...
Dos países en un noble lazo, con el alma se dan un abrazo
es la madre que va a visitar los hijos que viven en otro hogar...
Franco y Durán, Ruiz de Alda
los geniales los tres con Rada son inmortales,
los españoles van con razón cantando,
al ver el galardón de su Nación...
Y cantarán con todas las naciones,
entrelazando los corazones
y en tal clamor surge un tango argentino
que dice a España: ¡madre patria de mi amor!
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