|
Gordillo: Un bandolero del siglo XXI
27.08.12 - Escrito por: Antonio Fernández Álvarez
Me comentan que ya están habilitando una sala en el museo del bandolero de Ronda (Málaga) para dedicarla a Gordillo y su lugar teniente, ya están terminando las figuras que los representan perfectamente, pero lo del chapuzón de la piscina del palacio de Hornachuelos a descolocado al Director de Museo, la verdad que si cupiera la piscina podrían poner también a algunos de sus secuaces, bañándose.
Así veríamos desde los orígenes del bandolerismo allá por el siglo XVIII, el XIX y principios del XX final del bandolerismo romántico todos ellos allí recreados, al actual bandolerismos del siglo XXI. El contraste de los bandoleros que hay representados en el museo con sus ropas características pantalón de pana camisa blanca y zapatillas de cáñamo, sus trabucos, sus navajas, pistolas y escopetas. Con estos del siglo XXI con zapatillas de deporte, gorras de lino, sombreros de paja con publicidad incluida en la cinta y sus gafas de sol y portando banderas republicanas que son a todas luces ilegales, darían un colorido al museo y nos borraría el miedo y la impresión que causan José Ulloa "El Tragabuches", Francisco Ríos González "El Pernales", Juan José Mingola Gallardo "Pasos Largos", José María Hinojosa "El Tempranillo" y otros bandoleros allí reproducidos.
Claro que esto está todavía en estudio, porque otros se decantan por que los representaran empujando los carritos de mercadona y Carrefour, hay quien dice que quedarían mejor sentados en el suelo reproduciendo en la sala una sucursal bancaria y que un sistema de megafonía se oyesen sus frases eslogan: "El pueblo unido jamás será vencido", "Este banco lo vamos a ocupar", o la menos decorosa que le dedican a las fuerzas del orden cuando intenta impedir sus tropelías: "hijos de puta", o cualquier otra porque repertorio tienen.
Pero me cuentan que desde que esta idea ronda en la cabeza del director del museo, será el fantasma del tempranillo con el cual han querido comprar a Gordillo será solo por la rima que haríamos con ambos nombres, el que se oye pasear por la noches en el museo y grita: "ni de coña, nosotros aquí representados eramos bandoleros serios y ociosos", estos son solo turba, eso si su capitán dice ser profesor de historia, pero trasnochado parece anclado en una época pasada y se cree un personaje venido de otro momento.
En el museo del bandolero también está representada la Guardia Civil que fue el azote de bandolerismo sus trajes de época, armas, etc. Para este museo imaginario con estos bandoleros del siglo XXI, no hace falta salas que representen la fuerzas del orden ya que no pintan nada como tampoco lo hacen cuando estos bandoleros del siglo XXI cometen sus fechorías, sino ahí están sus titubeos a hora de ejecutar cualquier acción contra ellos, aunque reconozco que están atados de pies y manos por el poder político.
|
|
|
|
|
|