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Caín
03.03.13 - Escrito por: Rafael Valentín Villar-Moreno
 Desde el principio de la humanidad según La Biblia, la disputa entre hermanos ha sido una contante a través de los siglos. Esta triste verdad no nos excusa y sabemos que esta conducta es pecaminosa.
En estos momentos en que la corrupción alcanza cotas jamás alcanzadas, donde no se puede meter las manos en el fuego por nadie, y donde los concejales de pueblo son los ejemplos preferidos para decirnos que no toda la clase política es corrupta, vienen los munícipes de Cabra y haciendo gala de un cainísmo extraordinario tratan de desmentir el sentir general. Me preguntarán ¿es que son corruptos?, no creo que lo sean, es peor son comulgantes de participación con sus partidos.
Me explico. Los puntos de los plenos que de verdad tienen que ver con los ciudadanos, se despachan casi de una tacada y por unanimidad. Cosas como permuta de una parcela en el PAU R2 y otras cosas de ese tenor, -que dirían los técnicos municipales- se despachan en la comisión, y los ciudadanos nos quedamos sin saber de que se trata. De saberlo a los mejor algún otro ciudadano que no lo hace por ignorancia, podría tratar de permutar otra parcela, o cosa de similar tenor.
Luego llegan las mociones, que a los ciudadanos nos importan un carajo, y aquí salta la discusión, donde se emplea artillería gruesa, donde en el ardor de una estúpida batalla, a veces se dicen cosas muy difíciles de olvidar, y por favor no nos vengan con la hipócrita afirmación de que las cosas que se dicen en el pleno se quedan en el ámbito político, de se así es que no tienen vergüenza. Lo siento pero yo no serviría para esto. A lo largo de mi vida he sido alguna vez tentado, por diferentes fuerzas, a integrarme en alguna candidatura, además en un puesto donde era razonable pensar en alcanzar el sillón. A todos se lo agradecí dándole como argumento mi creencia de que tendrían que pasar aún cincuenta años antes de que un pequeño industrial de una ciudad también pequeña, pudiera figurar en una lista, con la seguridad de que eso no le iba beneficiar ni perjudicar. De hecho son muchos más los profesionales liberales y los empleados públicos que forman las listas, que los del comercio o la industria.
Pero la razón arriba expresada, era sólo la mitad de mi rechazo. La otra mitad es mi gran capacidad para perdonar ofensas, tan grande como mi incapacidad para olvidarlas. Podría haberme pasado media vida en los juzgados. Aparte de ello me conozco y soy culillo de mal asiento. De ser hoy concejal de la oposición en el ayuntamiento de Cabra, don Fernando Priego, seguramente me tendría que llamar muchas veces al orden, retirarme el uso de la palabra, mandar a la policía local que me desalojara, etc., y como consecuencia más juzgados... mejor están las cosas como están.
Convencido de que yo no tengo tragaderas para tanto sapo, le ruego a los componentes de la corporación en su totalidad que no se comporten como Caín. Me parece denigrante que los mayores desacuerdos se produzcan en las mociones. A rédito político de intereses que poco tienen que ver con Cabra. Como la parte más limpia que nos queda de la llamada clase política no se dejen contaminar de esa comunión de participantes con sus partidos, y no jueguen a reproducir en los plenos los debates del Congreso o el Parlamento de Andalucía. Ustedes son concejales, y han sido elegidos para gobernar el pueblo. Los diputados autonómicos y nacionales han sido elegidos en otras fechas y comicios. La ley marca las competencias y ámbitos de cada quien. No reproduzcan debates que no les corresponden. Quien no tenga representación parlamentaria que tampoco se arrogue la confianza que el pueblo andaluz les niega repetidamente. Y quien tenga "lucenitis aguda", que se lo haga mirar en la calle Baena.
Por favor debatan las mociones en comisión y vótenlas en el pleno como cualquier cuestión relativa al PAU R2, así les quedará tiempo para explicarnos lo del repetido PAU en el pleno. Luego ya tendrán tiempo de echarse en cara lo de la mierda de los perros en ruegos y preguntas, punto en el que la cosa va por tocas, y según donde se esté, gobierno u oposición, ya le pedirán a Luis o a Antonio el pase de las fotos.
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